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Cuando tengas tu tabla nueva, hazte con una buena funda para protegerla de los golpes en los viajes y traslados a la playa. Gran parte de las averías se producen fuera del agua.
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Se recomienda esperar 2 semanas desde el momento en que se terminó de laminar para su primer uso para asegurarse de que la resina haya terminado de secar bien así como mantenerla en un espacio con una temperatura no superior a 25º C.
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Nunca dejes tu tabla expuesta a la luz del sol ni en ambientes muy calurosos pues se deteriora el material que la compone. En todos los casos, apoyarla con las quillas para arriba. En caso de guardarla un largo tiempo, busca un sitio oscuro y fresco.
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No limpies tu tabla con disolventes, alcoholes ni acetonas, ya que la debilitarían; se recomienda usar aguarrás.
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Cambiar la parafina cuando esta se ponga oscura o se impregne de arena, aproximadamente cada 15 días está bien. Al final de cada temporada debes eliminar totalmente la parafina de tu tabla.
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Hasta los "toques" más insignificantes pueden traer consecuencias desastrosas. Te recomendamos que después de cada sesión revises tu tabla y en caso de que sea necesario la lleves a reparar. Actuar con rapidez te permitirá
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